Esto se acaba...

Otra vez lunes, pero este lunes tiene algo de especial: quedan cuatro días para finalizar el motivo por el que me vine a la capital. Acabo las clases del master, y a partir de aquí sólo volveré a los madriles para solucionar dudas -que no serán pocas, lo estoy viendo-... o por placer, lógicamente. Afronto esta semana con mucha mayor ilusión que cualquiera de las anteriores, pero hay un claro motivo detrás: el viernes vualvo a mi patria, y el domingo empiezan las fiestas; los nueve mejores días del año.

Con el fin del master se me presentan todavía un par de meses de trabajo de diseño y programación, además de la ardua labor de buscar trabajo como periodista -nada fácil en los días que corren-. Además, tengo entendido que mi promoción de Periodismo tiene copadas casi todas las esferas periodísticas alicantinas. Me alegro: hay gente muy capaz y muy trabajadora con la que tuve el placer de compartir clase, conocimientos, experiencias y fiestas.

En cuanto al master, hemos de desarrollar un proyecto basándonos en un rediseño de una web ya existente, y cuya temática no es muy llamativa para mí, pero bueno, jeje. Se trata de la web de la Compañía Nacional de Danza... Se aceptan sugerencias que os agradezco de antemano, jaja.

Pero bueno, vamos a hablar de algo serio. En los diarios de hoy, podemos leer unas declaraciones del presidente iraní, Mahmoud Ahmadineyad, en las que insta a sus compatriotas a luchar por defender su derecho a mantener la energía nuclear. El problema son los fines con los que los antiguamente conocidos como persas desarrollen este tipo de energía. En mi humilde opinión, Ahmadineyad utiliza el uranio enriquecido como una especie de escudo antiyankis, para defenderse ante una eventual invasión tipo 'guerra preventiva'.



Lo raro es que en Irán parece haber constancia de que hay armas de destrucción masiva, no como en Irak. Con esto no quiero decir que Mr. Danger invada nada, es más, que se vuelvan los marines americanos a casa y no salgan en su p..a vida -como diría Evaristo-. Por otra parte, la postura del presidente persa es comprensible: Bush tiene puestos sus ojos en Irán, por lo que hay que defenderse. Otra cosa es lo de las armas nucleares, que NUNCA han sido, son, ni serán un buen método de defensa, así que... ¡abajo con ellas!, pero en todo el mundo.

En otro orden de cosas, más relajantes y festivas, ayer me quedé boquiabierto. La razón: un macrobotellón un domingo sin razón aparente en pleno centro de Madrid. Cientos de jóvenes concentrados en La Latina sin una razón aparente, bebiendo unas rubias o bien caliomocho. Jamás había visto nada igual, y eso es lo comentaba la gente, especialmente los que explicaban a l@s Erasmus lo especial de vivir en este país y, más concretamente, en Madrid. Lo más gracioso era ver los caretos de la gente que pasaba, observando el panorama, jaja.

Para finalizar este post, una vez más reitero mi invitación a las fiestas de mi patria, del 22 de abril al 1 de mayo: nueve días de fiesta tanto histórico artística -por el día- como nocturna. ¡Salud y libertad para todos!.